En los últimos tiempos el estilo de inversión en dividendos crecientes ha ganado un gran protagonismo hasta tal punto que ha logrado incluso eclipsar otros estilos de inversión. Cada vez hay más gente que sigue este estilo de inversión, que se ha popularizado a raíz de la explosión del movimiento FIRE (Financial Independence and Retiring Early).
Lo curioso es que muchas de las compañías que incrementan dividendos año a año, entre las que se encuentran las aristócratas del dividendo (compañías con un histórico de pago de dividendos crecientes superior a 25 años), tienen en marcha un programa de recompra de acciones al que normalmente no se le presta tanta atención como se hace a que el pago de dividendos sea constante y creciente.
En este artículo os explicamos sucintamente el efecto que tienen tanto las recompras como el pago de dividendos sobre la situación financiera de la empresa y qué efectos puede tener sobre el accionista tanto uno como otro.
Pero antes, para que todo el mundo pueda seguir el artículo, un poco de teoría…
Una recompra de acciones es una acción corporativa por medio de la cual, una empresa compra sus propias acciones en el mercado, con el objetivo o bien de amortizarlas (es decir, eliminarlas de circulación) o bien de mantenerlas en autocartera para otros fines.
El efecto más inmediato y obvio que tiene una recompra es que hace aumentar todas las métricas de la empresa que se calculan dividiéndose entre el número de acciones. Por ejemplo, a igualdad de beneficio obtenido, el beneficio por acción (BPA) aumentaría, ya que el número de acciones se ha reducido:
Por tanto, cuando una empresa recompra sus acciones, debe registrar en su balance las siguientes anotaciones:
Como se puede ver, una recompra de acciones reduce el efectivo de la empresa (que está en el activo corriente), porque es donde está el dinero que se gasta en comprar las acciones y al mismo tiempo reduce el patrimonio neto de la empresa en la misma cuantía (ya que se amortizan las acciones compradas).
También puede darse el caso de que la empresa compre sus propias acciones endeudándose para ello, con lo que los movimientos que se registrarían serían los siguientes:
En este caso, la empresa contrae una deuda a largo plazo que se registra en su pasivo no corriente y que lo hace aumentar. El patrimonio de la empresa se reduce en la misma cuantía.
Y ya vamos terminando con la teoría…
Aunque la mayoría de las personas que lean este artículo sabrán lo que es un dividendo, a efectos de ser exhaustivos, lo vamos a incluir. Sobre todo, también para ver el efecto que tiene el pago de dividendos sobre las cuentas de la empresa.
Un dividendo es una cantidad que la empresa reparte entre sus accionistas y que procede de la parte del beneficio obtenido que no se destina a reservas de la empresa.
¿Qué efecto tiene sobre el balance de la empresa? El mismo que el de la recompra de acciones:
Aquí es donde está la clave para identificar si lo que se adecua mejor a nuestro perfil inversor es el de una empresa que se centre más en las recompras de acciones o el de una empresa de dividendo, como pueden ser los aristócratas del dividendo.
Algunos de los efectos que hemos identificado a tener en cuenta son los siguientes:
Hasta aquí el artículo de hoy, esperamos que te haya gustado. Si tienes alguna duda o comentario, no dudes en pasarte por nuestro foro para exponerla.